Estrés

¿Qué es el estrés?
El estrés es una respuesta natural física o emocional del ser humano ante ciertas situaciones que implican una sobrecarga o una presión concreta.
El estrés emocional puede ser de dos clases:
- Estrés positivo (también llamado “eutrés”) , como por ejemplo el que puede sentir un actor experimentado antes de salir a escena. Este tipo de estrés te mantiene alerta e incluso, en situaciones de peligro, puede salvarte la vida porque te da la fuerza suficiente para defenderte ante un ataque o accidente.
- Estrés negativo (también llamado “distrés”), que es al que nos referimos usualmente cuando hablamos de estrés. La respuesta es exagerada y entonces, comienza a afectar a tu salud y a las relaciones con tu entorno.
Cuando el estrés emocional se convierte en crónico es cuando puede tener consecuencias fatales tanto en nuestra salud física como en la emocional.
Hay muchos estudios que avalan el aumento del estrés en la sociedad española. Por ejemplo, el Instituto de Biomecánica de Valencia (IBV), publicó en mayo de 2012 un informe en el que se revelaba que el 70% de los españoles opinaba que el principal obstáculo para su calidad de vida era el estrés.
¿La gran ventaja? Que está en tus manos el reducir el estrés. Afortunadamente, la psicología dispone de técnicas para combatir eficazmente el estrés. Si detectas que el estrés te sobrepasa, no esperes a que origine otros problemas y acude a mi despacho de psicología.
Causas, síntomas y consecuencias
En este caso, las causas se pueden dividir en causas a nivel interno o externo:
A nivel externo
- Dificultades en las relaciones
- Cambios vitales o a nivel laboral
- Problemas financieros
- Problemas familiares
A nivel interno
- Pesimismo
- Autocrítica
- Expectativas poco realistas
- Perfeccionismo
Los síntomas del estrés pueden ser físicos, psicológicos o conductuales.
A nivel físico, estos son las más comunes:
- Tensión y dolores como el dolor de espalda o cabeza.
- Problemas en el aparato digestivo como, cólon irritable, dispepsia, acidez de estómago, gases y digestiones pesadas.
- Trastornos coronarios.
- Trastornos endocrinos.
- Diabetes.
- Cansancio físico.
A nivel psicológico o emocional:
- Ansiedad, angustia y nerviosismo.
- Depresión y alteraciones en el estado de ánimo.
- Dificultades para tomar decisiones.
- Problemas de concentración y de memoria.
- Fatiga mental.
- Irritabilidad.
- Insomnio.
- Lentitud de pensamiento y sensación de embotamiento mental.
Los síntomas conductuales más frecuentes son:
- Bruxismo (rechinar los dientes).
- Alteración en la ingesta de alimentos, ya sea por exceso o por defecto.
- Beber alcohol en exceso.
- Fumar más frecuentemente.
- Onicofagia (comerse las uñas).
- Tics nerviosos.
Las consecuencias del estrés negativo o crónico nunca serán buenas ni para ti, ni para tu salud. Muchas de las enfermedades crónicas son enfermedades psicosomáticas, en las cuales juega un papel muy importante el estrés.
El estrés podría desarrollar otras enfermedades como:
- Ataques al corazón.
- Problemas gastrointestinales y colon irritable.
- Insomnio.
- Depresión.
- Obesidad.
- Problemas de piel,